Cómo escribir una historia corta

Aprender a cómo escribir una historia corta es un ejercicio básico pero esencial para cualquier escritor, independientemente de que luego quieran especializarse en escribir trabajos más extensos. Las historias cortas nos enseñan a tejer argumentos bien construidos sin la necesidad de tener cuatrocientas páginas, mostrándonos una vez más de la importancia de empezar desde lo más simple para avanzar hacia lo complejo.

En este artículo quiero compartir contigo algunos consejos para escribir buenas historias cortas. Este género es de por sí un refinado arte y hay escritores que se dedican exclusivamente a ser maestros de esta estructura. No me consideró un buen escritor de este formato, pero aún así quiero compartir contigo algunos consejos que me ayudan a escribir historias cortas. Al final del artículo recomiendo algunas antologías que seguro te serán de gran utilidad e inspiración. También puedes leer en esta web algunas de mis historias cortas.

1. La importancia de la historia corta
2. Céntrate en unos pocos elementos
3. Elige las ideas que mejor se adapten a la historia corta
4. Recuerda: introducción, nudo y desenlace
5. Escribe rápido, edita lento
6. ¿Cómo? Lee muchas historias cortas

1. La importancia de la historia corta

Muchos escritores se lanzan a escribir sus kilométricas novelas sin ni siquiera darle una oportunidad a la historia corta. Esto es un error, pues este formato tiene muchísimo que enseñar a cualquier escritor.

De la gran cantidad de lecciones que nos dan las historias cortas, estas son algunas de las más importantes:

• Nos enseñan a terminar proyectos, dándonos una sensación de plenitud y satisfacción que no conseguiríamos si nos centráramos sólo en la novela (algo que podría tardar años).
• Nos enseñan la estructura básica de las historias que luego sabremos replicar en trabajos más largos.
• Nos enseñan que una buena historia no necesita de decenas de miles de palabras. En la simplicidad hay una gran belleza.
• Nos enseñan que en lo limitado es donde puede acontecer la magia. Lo limitado nos vuelve ilimitados. Es un reto creativo.
• Nos enseñan la verdadera naturaleza de nuestra historia y hasta donde pueden llegar. Muchos escritores descubren al escribir sus historias cortas que lo que tienen entre sus manos es una novela en potencia que pide ser convertida en un trabajo más extenso. Y al revés, hay veces que pensamos que tenemos una novela, pero al escribirla en un formato más breve nos damos cuenta de que ya es suficiente. Es la verdadera prueba de fuego para ver qué historia tenemos.

2. Céntrate en unos pocos elementos

El primer error básico al escribir una historia corta es que queremos contar demasiadas cosas en pocas páginas. Pero ese no es el propósito de la historia corta. La novela es inmersiva por su gran cantidad de palabras, pero la historia corta es directa, quiere transmitir algo de la manera más rápida y efectiva posible. La economía de las palabras tiene que ser muy ajustada, y por ello hay que tener claro desde el principio. Piensa que se considera una historia corta un documento Entre las 250 y las 7500 palabras.

Cuando empieces a escribir tu historia corta ten en cuenta estos elementos para limitarlos:

• Céntrate en un solo protagonista y no metas mas de dos o tres personajes. Cuanto más personajes haya más difícil y confusa se vuelve la historia. Combina características en un puñado de personajes o directamente quítalos si no tienen relevancia.
• Céntrate en un solo conflicto. Si hay más de uno acabas por perder al lector. No lo compliques y especifica qué conflicto tiene el protagonista. ¿Debe escapar de algún lugar? ¿Ha ocurrido un evento disruptivo en el mundo? ¿Tiene que encontrar la respuesta a un enigma? Especifica el conflicto y resuélvelo.
• Céntrate en una sola emoción que quieras transmitir. Puede ser sorpresa, miedo, tristeza, alegría etc. Pero no intentes hacer malabares con varias emociones. Intenta centrar todas tus fuerzas en transmitir una.
• Céntrate en unos pocos escenarios o entornos. No cambies de localización constantemente, quédate en unos pocos lugares (preferiblemente uno) y quédate ahí para que la historia fluya sin trabas.
• Céntrate en una sola acción. En una historia corta pasa una sola cosa. Por supuesto puede haber varios altibajos, pero es bueno que haya una acción importante y que de ahí se vaya desarrollándose el resto para no embotar al lector.
• Céntrate en un solo tema. Si tuvieras que describir tu historia corta con una sola palabra, ¿cuál sería? Ese es tu tema en el que tienes que enfocar tu atención para expresar.

Por ejemplo, en mi historia corta «La costilla del último hombre» intento centrarme en cada aspecto de manera individual: Sólo hay un protagonista (el amante del McRib), sólo hay un conflicto (quiere conseguir la hamburguesa pero no la encuentra siempre), sólo hay una emoción (la obsesión devota), sólo hay un escenario (mayoritariamente mental), una sola acción (la búsqueda del McRib) y un sólo tema (dejo que seáis vosotros quiénes busquéis dicho tema).

3. Elige las ideas que mejor se adapten a la historia corta

Elegir las ideas para tus novelas es el mismo proceso que con las ideas de tus historias cortas,, hay que saber escoger las ideas que mejor se ajusten a lo que buscamos conseguir.

La diferencia principal es que en la novela tenemos mucho más espacio para desarrollar los personajes y los temas, permitiéndonos más maniobra a la hora de contar la historia. Por eso a la hora de escoger una buena idea tenemos que tener en cuenta los siguientes puntos:

• La historia tiene que introducirse, desarrollarse y cerrarse en una cantidad limitada de palabras. No escojas historias que sabes que van a necesitar más páginas, elige aquellas que sabes que no necesitan más de lo establecido para contar y expresar lo que quieres. Por consecuente, no es lo mismo una historia corta de 500 palabras que una de 5000. cuanto más compleja sea la historia más palabras son necesarias.
• Repitiendo el primer punto: elige una idea donde puedas limitar y especificar las emociones, acciones, personajes y escenarios. Tu idea tiene que ir al grano y ser directa en lo que quieras contar. Recuerda, esto es un truco de magia en un espacio limitado. Haz magia con pocas palabras.
• Escoge ideas que no puedas sacarte de la cabeza. Esto puede parecer muy obvio, pero si tienes una visión muy definida y nítida te será mucho más fácil contar la historia que hay detrás. Piensa en una pintura, cuanto más clara sea la imagen que veas más hace volar tu imaginación.

4. Recuerda: introducción, nudo y desenlace

Es muy fácil sabotear nuestras historias una vez empezamos a escribirlas porque queremos que sean originales, únicas o especiales. Pero no quieras complicarte desde el principio, céntrate en lo que sabes hacer. Tu historia tiene que tener una introducción, un nudo y un desenlace. Así de simple, así de complicado.

Aquí algunos consejos prácticos a la hora de estructurar tu historia corta:

• En la introducción debes dejar lo más rápido y lo más claro posible la quién es el protagonista, dónde está, qué es lo que quiere y cuál es el conflicto. Si ya era importante en una novela aquí lo es más todavía. Tienes pocas palabras, úsalas bien. Orienta al lector nada más comenzar la historia.
• El primer párrafo es la promesa que le hacemos al lector sobre lo que se va a encontrar. Eso es el género. ¿Le espera una aventura espacial? ¿Un western? ¿Un thriller? Muéstrale lo que vas a leer, cumple tu promesa y sorpréndele con el desarrollo de la historia.
• El nudo debe desencadenarse también con rapidez. Tiene que tener idealmente dos puntos de inflexión o dos momentos de crisis que obstaculizan que el protagonista consiga lo que quiere.
• El final tiene que cerrarse con un lazo satisfactorio. En una historia corta es mucho más fácil conseguir esto, ya que hay mucho más control en lo que dices al principio de la historia, durante ésta y al final. Frases que al comienzo significan una cosa y al final es otra o que cargan otro significado después de acabar de leer. No desaproveches esta oportunidad.
• Como decía el escritor Rogert Zelazny: «Escribe tu historia corta como si fuese el último capítulo de una novela.» Escribe tu historia con ese espíritu de urgencia de querer transmitirlo todo al llegar al final.
• El título tiene que enriquecer la historia: Como con cualquier historia, el título tiene que tener una función más allá de despertar tu curiosidad. Tiene que darle significado a la historia y enriquecerla. Juega con el título, explora sus infinitas posibilidades.

5. Escribe rápido, edita lento

Uno de los mejores consejos sobre escribir historias cortas (y algunas veces novelas también) es el de la escritora Joyce Carol Oates: «Arde con el primer borrador.» Esto quiere decir que cuando escribes una primera versión de tu historia cortas debes hacerlo lo más rápido posible y que las palabras quemen en tus manos directamente desde tu cabeza.

Muchas veces cuando sobre pensamos demasiado lo que escribimos nos ponemos nosotros mismos la zancadilla y no permitimos que la historia se plasme. El primer borrador es sólo eso, un primer boceto de lo que la historia puede llegar a ser, un diamante en bruto. Luego viene lo difícil: Editar.

Escribe rápidamente el primer borrador y luego tómate tu tiempo a la hora de editarlo. Esto no sólo te da una satisfacción de terminar una historia (por corta que sea) sino que además te permite luego centrarte en todo lo que funciona y lo que no. Aquí sí es el momento de corregir y ver si explicas demasiado, si no quedan claras las motivaciones y conflictos, si has unido bien la introducción con el desenlace y un largo etcétera.

Recuerda: escribir es reescribir.

6. ¿Cómo? Lee muchas historias cortas

Hay dos consejos básicos aplicables a cualquier escritor: tienes que escribir y tienes que leer. Y con las historias cortas no puede ser distinto. Aprende de los maestros de este increíble género, fíjate en cómo lo hacen e inspírate para escribir tus relatos. ¿Y cuál es la gran ventaja? Se lee mucho más rápido una historia corta que una novela.

Aquí os dejo algunas de mis recomendaciones personales. Perdonad que sea todo de fantasía y ciencia ficción, pero son los campos que conozco y de los que puedo hablar con cierta autoridad:

• Las historias cortas que publica la editorial Tor en su web me parecen impecables. Una de mis favoritas y que nunca podré olvidar es The languague of knives de Haralambi Markov. Métete en su web y explora todas sus historias cortas. Lee las que te llamen la atención.
• Visiones peligrosas es una de las antologías de historias cortas de ciencia ficción más influyentes de la historia. Vale completamente la pena. Reunida por Harlan Ellison reune a algunas de las mentes más brillantes de su época como Philip K. Dick o Samuel R. Delany.
• The big book of modern fantasy tiene a renombrados autores de fantasía como Jorge Luis Borges, Ursula K. Le guin, Jeff Vandermeer, Alberto Chimal y Terry Pratchett. Una auténtica delicia.
• Neil Gaiman no podía escapar de esta lista. Para nuestra suerte tiene varios libros que recopilan sus mejores historias cortas: Humo y espejos, Objetos frágiles y Material sensible
• Chuck Palahniuk (El club de la lucha) es un maestro de la provocación y la historia corta. Make something up – stories you cant unread no te dejará indiferente.

En mi web también puede leer de manera gratuita algunas de mis historias cortas que espero que sean de utilidad, inspiración y lo más importante, que las disfrutéis leyendo.

También os recomiendo que os paséis por mi artículo «10 consejos para escribir mejor en prosa», que os será de gran utilidad para el aspecto más formal de la escritura. Este artículo y el de historias cortas van de la mano para ayudaros a escribir vuestras primeras historias, y por ello recomiendo leer (y sobre todo aplicar) ambos.

Además he creado recientemente un curso en la plataforma Udemy de escritura creativa centrado en el importante ejercicio de la historia corta del cual estoy muy orgulloso. Espero de verdad que os sea de utilidad, de inspiración y que sobre todo os ayude a contar todas esas historias que tenéis dentro de vosotros.

Espero que este artículo te ayude a escribir mejores historias cortas. Nos vemos en el siguiente artículo. Hasta entonces, pase lo que pase, sigue escribiendo.